Lo más importante al momento de practicar ciclismo, es saber elegir un buen casco. Este protege la zona más delicada del cuerpo, la cabeza, por lo tanto el cerebro órgano vital en exceso primordial y vulnerable a las caídas y golpes. Las principales necesidades que debe tener un buen casco son:
La protección y retención: lo más esencial es que el casco brinde una plena protección a la cabeza. Los modelos que actualmente se encuentran el mercado, están hechos de poli estireno expandido, este material tiene como principal objetivo absorber los golpes. Generalmente, los cascos de bicicletas montañeras, cuentan con más protección en la parte trasera del cráneo. Además, deben tener una buena retención, así garantizan la permanencia en su sitio en caso de algún impacto o caída.
La talla: algo esencial es la comodidad que el casco brinde a tu cabeza. No debe estar en exceso apretado ni muy suelto, ya que esto puede llegar a ser peligroso. Debes tener en cuenta que existen diferentes marcas, que fabrican diferentes tipos de modelos redondos u ovalados, se recomienda probar varios modelos para encontrar el que mejor se adapte a tu cabeza.
La ventilación: como la cabeza ayuda al cuerpo a regular temperaturas, debes considerar un casco que posea un buen sistema de refrigeración. Existen 2 tipos de ventilación, la interna que posee unos canales tallados en la cubierta interior, los cuales ayudan al aire a dirigirse hacia algunas de las zonas más calientes de la cabeza. La externa, a través de las rendijas exteriores el aire fluye por la cabeza.
Las vísceras, algunos cascos poseen viseras ajustables, son de plena importancia para proteger los ojos, bien sea por la acción del sol o gotas que puedan llegar a tus ojos